Por mucho tiempo las palabras del Señor Jesucristo registradas en el evangelio según San Mateo, capitulo 16:13-20 han causado controversia.
La controversia radica en dos interpretaciones dadas a este pasaje.
Por un lado, unos creen que la roca sobre la cual la iglesia sería edificada es el apóstol Pedro. Del otro lado, están los que creen que la roca se refiere a Cristo.
Tratemos este pasaje de manera objetiva a la luz de la infalible palabra de Dios, la Biblia.
Para empezar, veamos el contexto donde surge la declaración en mención. Jesús mismo ha preguntado a sus discípulos: ¿Quién dicen los hombres que es el Hijo del hombre? Ellos le responden diciendo que es Elías y otros que es Jeremías o alguno de los profetas. Y entonces Jesús les vuelve a preguntar: Y vosotros, ¿quién decís que soy yo? Entonces Pedro responde: Tú eres el Cristo, el Hijo del Dios viviente.
Teniendo en cuenta esta conversación nos damos cuenta, sin lugar a duda, que el centro de esta es Cristo y no Pedro. Realmente Pedro aparece aquí por razón de ser quien responde a la pregunta de Jesús y no por merito alguno de parte suya, sino por revelación de parte de Dios mismo. Por tanto, como Cristo es el centro de esta conversación, entonces es a él a quien se refiere la expresión “esta Piedra” y no a nadie más.
Recurramos, ahora a la Biblia, para que nos enseñe a cerca de la piedra y las llaves.
En la carta a los Romanos 9:33 leemos: He aquí pongo en Sion piedra de tropiezo y roca de caída; Y el que creyere en él, no será confundido. ¿A quién se refiere esa piedra? ¿Será Pedro? Absolutamente no. Este pasaje de Romanos que a su vez cita al Profeta Isaías 28:16 se refiere a Cristo. Así lo afirmó el anciano Simeón cuando Jesús, siendo un niño, fue llevado al templo por primera vez. Este niño está destinado a provocar la caída de muchos en Israel, y también el ascenso de muchos otros. Fue enviado como una señal de Dios, pero muchos se le opondrán (Lucas 2:34 NTV).
El mismo apóstol Pedro se refiere a esta misma Piedra. Veamos en 1 Pedro 2:4 que dice: Ahora ustedes se acercan a Cristo, quien es la piedra viva principal del templo de Dios. La gente lo rechazó, pero Dios lo eligió para darle gran honra.
Vayamos nuevamente con el apóstol Pablo quien dijo, por inspiración del Espíritu Santo: Pues nadie puede poner un fundamento distinto del que ya tenemos, que es Jesucristo (1 Corintios 3:11). Este texto no deja lugar a la duda en cuanto a Cristo como la roca.
Y por si fuera poco, podemos citar otro pasaje. Efesios 2:20 dice: edificados sobre el fundamento de los apóstoles y profetas, siendo la principal piedra del ángulo Jesucristo mismo.
Hay otro pasaje, el cual podemos ver: 1 Corintios 10:4 que dice: y todos bebieron la misma bebida espiritual; porque bebían de la roca espiritual que los seguía, y la roca era Cristo.
Aun hay otros textos bíblicos que podríamos citar como prueba que la piedra es Cristo y no Pedro.
En la segunda parte de este escrito veremos otros puntos de importancia tales como el hecho que el Señor Jesucristo le cambiara el nombre a Pedro de Simón a Cefas y veremos también el significado de la palabra piedra.
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